martes, 15 de noviembre de 2011

Paradise Lost


"¿Es ésta la región, el suelo, el clima -Dijo entonces el perdido Arcángel-, ésta es la morada que a cambio recibimos de los Cielos, esta penumbra lúgubre por aquella luz celeste?.

Sea, puesto que aquel que ahora es Soberano puede declarar qué es lo recto: lo más preferible es lo que más nos aparte de él; en razón igual, supremo reina por la fuerza sobre iguales.

¡Hasta siempre, Campos venturosos donde es eterno el gozo! ¡Salve horrores, salve Mundo infernal!.

Y tú, profundo Averno, a tu nuevo dueño acoge: alguien cuyo espíritu no cambiará nunca, ni con el tiempo, ni en lugar alguno.

El espíritu vive en sí mismo, y en sí mismo puede hacer un Cielo del Infierno, o un Infierno del Cielo.

¿Qué importa dónde, si aún soy el mismo, si lo soy todo, sólo menos que ése al que el Trueno hace superior?.

Aquí al menos somos libres; el Omnipotente por envidia yermo tiene este lugar: no ha de echarnos de él.

Aquí seguros reinaremos, y según lo juzgo digno anhelo es reinar, incluso en los Infiernos: Mejor reinar en el Infierno que servir en el Cielo.

¿Mas por qué dejar a nuestros fieles amigos, compañeros y partícipes en nuestra pérdida, yacer así aturdidos en el lago del olvido sin llamarlos a tener su parte en la mansión desventurada; o de nuevo en armas congregados ver qué pueda recobrarse aún del Cielo, o perderse todavía en el Abismo?. "


"El Paraiso perdido" de Milton trata sobre la caída de los ángeles rebeldes, expulsados del Paraíso al principio de los tiempos por revelarse contra Dios.
A diferencia de la versión judeocristiana de los hechos, Milton muestra una nueva forma de ver de la historia: el Arcángel perdido (Lucifer, hijo de la Aurora, ahora Satanás) no es más que una especie de libertador. Sus ideales se basan en que Dios es un tirano, que ha creado a los ángeles sin libre albedrío y que se alza por encima de todos ellos con un poder absoluto que les obliga a inclinarse de rodillas ante Él, liquidando cualquier posibilidad de autonomía.
Lejos de resultar el reflejo de un monstruo, el Lucifer/Satanás de Milton pretende ser un héroe trágico, un rebelde cuya personalidad arrebatada e ideales a ultranza despiertan más admiración que repulsión.
El archifamoso prototipo de "Héroe Byroniano" está directamente sacado del Lucifer de Milton.
Ha sido Milton quién ha creado esa figura del "Antihéroe Fascinante", que aún sigue de moda y dando guerra sin cuartel en la ficción moderna.
Cualquier villano con trazas de resultar seductor o atrayente por sus ideas anárquicas y/o revolucionadoras, o simplemente por su magnética aura de convicción y por su lucha a muerte contra las normas y leyes establecidas, es un descendiente (más lejano o más cercano, depende, pero siempre familia) del Personaje creado por Milton.
Un Personaje que traspasa las meras páginas de papel y que también traspasa completamente su propia historia.
No es ya ni ángel ni demonio, sólo un Carácter profundo y marcado que siempre servirá de modelo para el imaginario popular.

1 comentario:

  1. Milton no se limitó a crear una mera novela (ya de por si una obra de arte). Desde luego, tampoco creó ningún tipo de teoría propia sobre el cristianismo... si no que simplemente hizo historia dando forma al Arquetipo de las personalidades torturadas, dobles, enfrentadas siempre contra el Destino y contra la Vida, y llenas de un encanto perverso que subyuga.

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